Sector Inmobiliario
Las inmobiliarias apoyan los créditos UVI, pero piden algunos cambios
ARGENTINA.- Luego de años de
estancamiento por el cepo cambiario y la ausencia de crédito hipotecario, el
sector inmobiliario confía en que los nuevos créditos para viviendas ajustados
por inflación, a través de las llamadas “Unidades de Vivienda (UVI)”,
reactivarán el mercado de las propiedades, aunque piden algunos cambios. Según
varios referentes del sector, los nuevos créditos estarían arrancando con
fuerza hacia finales de año si primero baja la inflación y la gente empieza a
hacer depósitos ajustados en UVIs, algo que permitiría fondear los nuevos
préstamos.
La mala noticia, sin embargo, es
que pese a los nuevos créditos seguirán las presiones alcistas en los precios
de las propiedades. Según Jorge Rozados, de Reporte Inmobiliario, “los valores
en pesos de las viviendas (algo común en el Interior) van a subir porque los
costos de construcción seguirán creciendo a la par de la inflación”, mientras
que “los precios en dólares (en las grandes ciudades) se mantendrán iguales si
sigue estable el tipo de cambio”. Los alquileres, en cambio, se enfriarían algo
al pasar más inquilinos a propietarios.
La principal complicación que
tienen los nuevos créditos, sostienen en el sector inmobiliario, es que aún la
inflación es muy alta: si bien la indexación permite a los bancos prestar a
tasas más bajas, está el peligro de que la deuda crezca si la inflación no
baja. También hay muchas dudas sobre la legalidad de la indexación, algo que
podría provocar juicios de los tomadores de créditos reclamando pagar igual
cantidad de pesos durante los 15 años del préstamo. Sin embargo, Rozados
explicó que no habría problemas legales con esto porque "el BCRA se ampara
en el decreto 905/02, ratificado por el artículo 71 de la ley 25.827, que exceptúa
de la prohibición de indexar a los créditos y depósitos".
Otra cuestión que afecta los
nuevos créditos, dicen en el sector, es la falta de credibilidad del índice por
el que se ajustarán las UVIs, el CER, luego de la intervención del INDEC en
2007. Pero además, Issel Kiperszmid, titular de la desarrolladora Dypsa,
explicó que hubiera sido mejor "usar el índice de variación de los
salarios (CVS) para ajustar los préstamos porque es más acotado a la realidad
del deudor, mientras que el CER es una medición más general".
Los desarrolladores reclaman
además que los bancos no limiten los préstamos a propiedades terminadas, sino
también a la construcción en pozo. "Debería haber también créditos para
los constructores, que luego lo transferirían a cada uno de los compradores del
pozo", dijo Kiperszmid. Y el titular de la Cámara Inmobiliaria Argentina,
Alejandro Bennazar, pidió que las inmobiliarias puedan ser “precalificadoras de
riesgo crediticio” antes de que el cliente vaya al banco, algo que agilizaría
los trámites de otorgamiento del préstamos entre dos y tres semanas.