Obras y Proyectos
Lo que hay que tener en cuenta para construir una vivienda
ARGENTINA.- Construir por primera vez una vivienda, puede ser todo un desafío. Son muchos los detalles a tener en cuenta para alguien que es ajeno al rubro, y es demasiado lo que está en juego.
No se trata solo de dinero, sino de las expectativas del núcleo familiar que habitará la nueva casa, del confort que se logre no solo con la vivienda terminada, sino al momento de habitarla por primera vez, y del estrés que genera la aparición de eventuales contratiempos, por no haber sido lo suficientemente precavidos. Hay que considerar un enorme abanico de factores, desde el diseño de la casa, los tipos de material a utilizar y a quién encomendaremos la tarea de levantar la obra, hasta factores económicos que pueden terminar afectando sensiblemente el costo final. En efecto, también se trata de dinero.
Algunas personas piensan que ítems como colores, diseño, revestimientos o iluminación, son detalles superfluos. Sin embargo, a la hora de ocuparse de ellos, se dan cuenta que hubiera sido bueno proyectarlos en conjunto con el resto de la obra.
La siguiente, es una serie de tips basados en la experiencia de quienes ya han transitado el mismo camino, que pueden servir como hoja de ruta inicial, a fin de no dejar cabos sueltos.
Proyecto: Empezar por el principio, es una premisa fundamental. El valor de un proyecto radica en que todo lo referido al “cómo” se llevará a cabo la obra, se subordina al master plan establecido. Para ello, es fundamental contar con el adecuado asesoramiento de un profesional matriculado. Hay una serie de detalles importantes a la hora de planificar, que en una etapa posterior son difíciles de modificar. La orientación de la casa es uno de ellos. La ubicación cardinal de la vivienda será determinante en el factor luminosidad, y eso ya no podrá modificarse una vez levantada la obra. Lo mismo sucede con el factor vientos, de alta incidencia en zonas como la nuestra. La elevación del terreno, es otro elemento importante. Resignar un buen relleno en el terreno en el que se va a construir, es un ahorro mal entendido, que más tarde puede resultar carísimo. La casa emplazada unos centímetros más alto no solo resulta más imponente, sino que sobrellevará mucho mejor los momentos de altas lluvias.
Presupuesto: Hacer bien los cálculos antes de arrancar es esencial para llegar a buen puerto. Es preferible no hacer cuentas ajustadas, sino más bien por exceso, a sabiendas de que siempre en una obra aparecen imponderables que incrementan el costo. En el presupuesto es necesario incluir el costo de la mensura y el movimiento de suelo, de los materiales, incluso los correspondientes a las terminaciones, los honorarios de los profesionales a cargo, la mano de obra, el costo de las presentaciones correspondientes en los organismos de control, y un plus para considerar posibles sobre costos.
Quienes tienen experiencia estiman que los costos calculados al inicio, crecen al menos un 30% hasta el final de la obra. Ello sin contar el contexto inflacionario aún vigente, y las turbulencias que pueda presentar la macroeconomía nacional a raíz de eventos extraordinarios (por ejemplo, una sorpresiva devaluación del tipo de cambio).
Tiempos de obra: Hay que saber que los tiempos de obra y el costo final del proyecto, son directamente proporcionales. Es decir, mientras más se alargue el plazo de finalización, mayor será el costo. En ese sentido es bueno planificar el proyecto por etapas, con metas alcanzables en tiempo y presupuesto. Para ello es muy útil tener presente desde el principio, en especial a la hora de armar el proyecto, cuáles son las necesidades primarias y secundarias que debe satisfacer la nueva vivienda. En la primera etapa, la casa debe quedar lista para habitar con las prestaciones mínimas que la familia necesita. El baño en suite o el vestidor en la habitación principal, por ejemplo, es algo que puede incluirse en el proyecto total, planificando su concreción para una segunda o tercera etapa.
Materiales: La elección de los materiales que conformarán el cuerpo de la obra, son toda una decisión. Hoy existe una variedad de materiales que obliga al menos a considerar opciones. Los sistemas de construcción modernos, en general trabajan en seco, lo que reduce considerablemente los tiempos, y permiten terminar una casa promedio en no más de 120 días, acotando también la incidencia de factores económicos como la inflación.
Permisos, seguridad y seguros: Las habilitaciones y los permisos correspondientes, son imprescindibles para el avance de la obra. Estar en regla no es una opción, es un deber. El cumplimiento de los controles y medidas de seguridad de la obra y de quienes trabajan en la misma, puede parecer una molestia, pero es en realidad un beneficio en tanto previenen posibles accidentes durante la realización de la obra. Es obligatoria la cobertura de ART para los obreros que intervienen, y es muy recomendable la contratación de un seguro para la obra, cuya cobertura abarque todo lo que se almacena puertas adentro del obrador.
En algunos casos, cuando la construcción se realiza en barrios nuevos, donde aun hay pocos vecinos y hay grandes descampados, es recomendable tener un sereno que cuide la obra de noche y los fines de semana.
Previsión: Planificar no es solo armar el proyecto y las etapas de concreción. Es prever de antemano posibles dificultades. Una cuestión que parece menor, pero que luego puede traer más de un dolor de cabeza, es controlar que el constructor respete adecuadamente las pendientes y desagotes. En nuestra región, suele no ser un problema grave, porque llueve poco. Pero esta visto en el último tiempo, que cuando llueve, lo hace en grande. Es ahí cuando salta a la vista si la pendiente de la obra y los desagotes no son los adecuados.
Los servicios, son un ítem importante. En algunos barrios nuevos no existe conexión a la red de cloacas, y se utiliza una cámara séptica. Sin embargo, es bueno dejar previsto bajo tierra la conexión cloacal hasta la vereda, para no tener que romper el día en que las cloacas lleguen al barrio. Algo idéntico sucede con la conexión de datos. Si se hace una previsión adecuada, es posible dejar los cables pasados de antemano por sobre el cielo raso, evitando que más tarde se vea afectada la estética.
Por último, el costo de las terminaciones, suele tomar desprevenido a más de uno. En general, sucede que los materiales necesarios para los detalles (grifería, revestimientos, pisos, aberturas, luminarias), son los más caros de la obra. Ir comprando estos elementos desde el principio, es una buena estrategia para no quedarse sin recursos al final.
Datos
La inflación acumulada de los últimos 12 meses. Todo indica que el año cerrará con un incremento no menor al 20%.
30% - El precio del metro cuadrado en el sistema de construcción tradicional es de $ 16.000.
120 días - Lo que demora levantar una casa promedio, con los nuevos sistemas de construcción en seco del tipo steel frame o panel sip.
La falta de experiencia o de planificación puede atentar contra la concreción del sueño de la casa propia. Un buen asesoramiento es muy importante.
Poner todos los elementos arriba de la mesa antes de tomar decisiones puede ser determinante para el resultado final obtenido en calidad y costo.
Consejos prácticos
Los cálculos que se realizan antes de comenzar la obra siempre se modifican durante la marcha. En especial si los tiempos se alargan y hay inflación.
Algunos detalles que parecen mínimos no pueden modificarse una vez que se levantó la casa. Es mejor proyectar incluso los detalles.
Estar atento a oportunidades y promociones puede abaratar ciertos ítems.
Fuente: Río Negro