Para arquitectos: Estos son los 10 techos más bellos del mundo

ARGENTINA.- La búsqueda de los techos más bellos del mundo ofrece resultados muy dispares. Obviamente, entre las miles de maravillas arquitectónicas del mundo, parece imposible elaborar el ránking definitivo e indiscutible.

El que sigue no es, sin embargo, uno más. Ha sido confeccionado por Jonathan Glancey, en la actualidad responsable de la información sobre arquitectura y diseño en la web de la cadena televisiva británica BBC, periodista especializado que ha desarrollado antes su profesión, siempre relacionado con estas disciplinas.

La decena de techos aquí recogidos suponen una excelente y variada muestra de la belleza que Exhibe un espacio que, en su histórica vocación de acercarse al cielo sin abandonar la tierra, se presenta en muchos casos como el punto último en el que confluye el ejercicio de arquitectura y diseño desarrollado en su entorno, la guinda del pastel que corona una obra excelsa.

Hay en esta selección edificios con siglos de antigüedad, pero también contemporáneos; religiosos, culturales e incluso meramente funcionales, pero todos ellos evidencian un denominador común: la más singular belleza.

#1. Castello di Sammezzano, Leccio, Italia

Los fascinantes techos y bóvedas de la decoración de la habitación “pavo real” en este palacio italiano abandonado cerca de Florencia hablan por sí mismos. Pavos reales, y otros objetos exóticos, eran la fuente de la decoración de inspiración para encontrarse a lo largo de las habitaciones vacías aparentemente sin fin de este edificio de ensueño. El cambio de imagen de estilo morisco de lo que era un palacio mucho más antiguo fue el trabajo de la vida de Ferdinando Ximénez Panciatichi d’Aragona. Aunque el aristocrta italiano arquitecto, ingeniero, botánico, filósofo y político nunca visitó Oriente, se imaginó un mundo de formas y colores exquisitos y muy exóticos que trajo a la vida en Leccio entre 1843 y 1889.

#2. Catedral de Ely, Cambridgeshire

Terminado en 1334 por el carpintero real William Hurley, la exquisita linterna de madera sobre la torre octogonal central de la catedral de Ely es uno de los mayores logros de la ingeniería estructural y diseño medieval. Desde el suelo de la catedral, la linterna se presenta como el centro de una gran estrella, de ocho puntas, con una talla de Cristo en la gloria en su centro.

#3. Solna Centrum estación de metro, Estocolmo

Con mucho, la atracción más fascinante del centro comercial Solna Centrum de Estocolmo es la estación de metro de la línea azul que le ha funcionado desde 1975. Los artistas Anders Åberg y Karl-Olov Björk han pintado el lecho de roca del pasaje subterráneo creando una emocionante escena. Montarse en las escaleras mecánicas es como ser arrastrados a la cueva de algún hechicero. El Metro como “la galería de arte más larga del mundo”. Tal vez sólo el metro de Moscú, de una época anterior, sea comparable.

#4. Grand Central Station, New York

Durante décadas, el techo del zodiaco de la Grand Central Station de estilo Beaux-Arts diseñada por Warren y Wetmore y Reed y Stern, impresiono y admiró a multitud de viajeros. Estaba cubierto de gruesas capas de alquitrán como resultado de un sinnúmero de cigarrillos fumados por generaciones de viajeros que se dirigían a las plataformas 67 de la estación. En 1998 el techo limpiado y restaurado se abrió al público nuevamente.

#5. Mezquita Shah, Isfahán

En 1598, Shah Abbas trasladó la capital persa a Isfahán. Aquí, encargó una serie de edificios religiosos y civiles ambiciosos y bellos. Pero, debido a que el único material de construcción disponible en Isfahan eran ladrillos de barro cocido, existía el temor de que los nuevos edificios no lucirían en todo su esplendor. Las nuevas técnicas de cocción de azulejos de colores, sin embargo, permitieron a los arquitectos del Shah deleitarse con maravillosos paños de colores. Diseñado por el maestro calígrafo y miniaturista Rezza Abbasi, el azul, amarillo, turquesa, rosa y azulejos verdes capturan y reflejan la luz de esta ciudad.

#6. Haesley Nine Bridges Golf Club House, Yeoju-gun, Corea del Sur

Diseñado por Shigeru Ban, el arquitecto japonés famoso por una nueva generación de edificios de papel y cartón, este club de campo abierto en el año 2010 cuenta con un elegante vestíbulo. Vigas de madera laminada entrelazadas inspiradas en elementos naturales proporcionan a este espacio un intencionado efecto poético.

#7. Heydar Aliyev Centre, Bakú, Azerbaiyán

El suelo, las paredes y los techos curvilíneos de este centro cultural, abierto en 2012, forman un todo sin fisuras. El efecto es mágico y verdaderamente notable, como si su arquitecta, Zaha Hadid hubiera reinventado las reglas de la construcción. La compleja cáscara de roble blanco que envuelve el auditorio se encuentra dentro de un marco de acero. Esto le da la rigidez necesaria a la estructura y al tiempo que permite el auditorio a sentir como si estuviera flotando en el espacio libre.

#8. San Pantalón, Dorsoduro, Venecia

De finales del siglo XVII, esta deslumbrante pintura que cubre 443 metros cuadrados y da la ilusión de continuar la arquitectura de la iglesia a través de columnas. Esta pintura ilusionista, con sus puntos de vista en escorzo es la obra de Gian Antonio Fumiani (1645-1710).

#9. Sala de oración por las buenas cosechas, templo del cielo, Pekín

Templo del Cielo es un vasto complejo de edificios religiosos construidos durante el reinado del emperador Yongle de la dinastía Ming (nacido Zhu Di). Terminado en 1420, la Sala de tres niveles de Oración evocan y representan horas, días, meses y temporadas del año. El templo fue construido sin un solo clavo. Los colores distintivos representan diversas evocaciones de la buena fortuna, la alegría, la prosperidad y la gloria de dominio imperial. Se quemó en 1889 y fue reconstruido para los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

#10. St Stephen Walbrook, Londres

Aparentemente St Stephen Walbrook es una estructura muy modesta. En el interior, sin embargo, esta iglesia diseñada por Christopher Wren demuestra ser una de las maravillas arquitectónicas de finales del siglo XVII en Europa. La cúpula esta sustentada por ocho columnas corintias y ocho arcos interrumpidos por la claridad de las ventanas. Se trata de un modelo a escala de la cúpula que Christopher Wren tenía la esperanza de construir para la catedral de San Pablo.