Entrevistas
Cómo hacer reformas en nuestra casa sin morir en el intento
BUENOS AIRES.- Vivir en Argentina es caro. Con procesos económicos o políticos cambiantes en un círculo interminable, las nuevas reglas de juego, las devaluaciones, la baja de la actividad económica, el desempleo y las crisis sociales hacen que proyectar sea casi un misión imposible.
Esto, aplicado a las ganas de hacer refacciones o remodelaciones en nuestro hogar, aplica de la misma manera: cada vez es más caro y, una vez que nos decidimos a hacerla, el contexto general del país no nos muestra su mejor cara.
Por eso, nada es más importante anticiparse en el tiempo para poder planificar una reforma, contactar a profesionales y lograr terminarla en el tiempo estipulado pero, por sobre todas las cosas, con el presupuesto acordado. Y aquí viene la cuestión más complicada.
InformeConstrucción.com consultó a los profesionales más destacados sobre el tema. Para Ángeles Achilles, de Línea Vertical, es indispensable recurrir a profesionales que avalen todo el proceso de obra y, salvo disparadas del dólar, cumplir el objetivo en tiempo y forma y con el dinero que se contaba para ello.
InformeConstruccion: ¿Cómo logramos cumplir con el sueno de la ampliación o refacción de nuestra casa en estos tiempos tan críticos
Ángeles Achilles: Si bien es cierto que cuando se transitan crisis hay una tendencia a paralizar y observar qué sucede, es una realidad que el dinero se licua pero al mismo tiempo las mejoras conservan su valor, además de brindarnos un nuevo aire al espacio y llenar de buenas energías nuestro hábitat. Por otro lado, la clave está en la contratación de profesionales altamente calificados que acrediten la experiencia necesaria para ahorrar tiempo y dinero. Tener una idea clara y precisa de la reforma y estilo luego de haber escuchado las necesidades del cliente y actuar en consecuencia, presupuestando y siendo precisos tratando de cuidar los desvíos, como así también ser proactivos en las búsquedas de oportunidades que brindan algunas tiendas.
IC: ¿Es posible llevar adelante reformas en una casa sin morir en el intento?
AA: Sí, claro que si. Es importante la contratación del equipo de profesionales y la confianza por parte del cliente por un lado y el compromiso, la dedicación y la seriedad con el que se abordan las tareas por parte de los arquitectos. Cuando se logra hacer una buena administración de procesos y respetando planes de trabajo, se logra reformar una vivienda de acuerdo a las necesidades y el bolsillo de cada cliente. Por eso cada reforma es única porque simplemente es a medida.
IC: ¿Se puede abaratar o financiar refacciones o ampliaciones pequeñas/ medianas en la actualidad?
AA: Realmente, es muy difícil financiar obras en un contexto país como el reinante, la variación del dólar hace que los precios fluctúen continuamente, el impacto en muchos de los productos que se usan en construcción impacta de manera notable, motivo por el cual los financiamientos son muy complejos porque las tasas de interés deberían ser altas y en consecuencia las cuotas también.
Abaratar sí porque siempre se buscan opciones para hacer reformas, se rastrean oportunidades y en eso radica nuestra eficiencia de hacer costeos , buscar y conseguir el mayor rendimiento de los fondos asignados a la reforma o refacción.
IC: Económicamente, ¿existen opciones para llevar adelante una construcción, refacción o ampliación?
AA: En el caso de reformas puntualmente, depende la economía de cada cliente, a veces cuando los recursos no son suficientes para todo, se opta por hacer reformas parciales. Por ejemplo, se renueva la cocina y luego en otra instancia el baño. Hay una realidad, el mercado ofrece un abanico en cuanto a calidades y precios de materiales, revestimientos o sanitarios adaptable a cada bolsillo. En construcción propiamente dicha, se puede ir acopiando materiales para congelar precios y de esta manera ir cubriendo el efecto de la incertidumbre y los aumento que genera la constante fluctuación de la moneda. Es de vital importancia ya sea, que decidamos emprender una reforma, una ampliación o una construcción, en primer lugar saber qué deseamos, cuáles son las necesidades a cubrir y con cuánto capital contamos para concretarlo. En base a ello comenzar con los trabajos preliminares de proyecto, costeo y alcance. Siempre se debe ser claros y no desviarse de los lineamientos porque siempre será más costoso corregir un error que hacerlo bien desde el inicio.