arquitectura
Rompiendo prejuicios: Mitos y verdades de la arquitectura sostenible
En un mundo que necesita incorporar prácticas cotidianas sustentables y menos nocivas para el planeta, repensar la arquitectura es clave. Existen cada vez más experiencias exitosas al optar por materiales eficientes y sistemas constructivos y de reutilización de recursos que convierten a estos procesos más amigables con el entorno.
Sin embargo en este camino se han generado leyendas y versiones que es necesario desmitificar acerca de los costos, plazos e infraestructura necesaria para construir de manera eficiente y sostenible. Para poder avanzar hacia una arquitectura verdaderamente responsable, que promueva el bienestar conjunto, es necesario romper con algunos prejuicios y abrirse a nuevas estrategias de proyección sustentables, que a su vez no pierdan de vista la belleza a la que aspira la arquitectura como disciplina.
En este sentido, el Arq. Guillermo Durán, director del estudio de arquitectura HABITAR SUSTENTABLE, menciona algunas creencias a desterrar, sobre todo en base a las consultas de usuarios, que permiten poner luz acerca de procesos y una mejor utilización de los recursos disponibles en el quehacer arquitectónico.
MITO 1: “la construcción sustentable es muy cara”
FALSO: En primera instancia, no se reconoce una gran variación en el costo y cantidad de materiales y de mano de obra en sí para llevar adelante un proyecto convencional, respecto a uno sostenible., Aunque globalmente algunos sistemas o materiales sostenibles pueden tener un costo inicial superior en relación a los tradicionales; su elección al inicio de un proyecto va a brindar a los comitentes un ahorro significativo a largo plazo en términos de eficiencia energética, resistencia, mantenimiento y vida útil en su vida cotidiana, convirtiéndo se de esta manera en una inversión provechosa.
En lo que a diseño se refiere, la arquitectura sostenible al tener en cuenta las condiciones del contexto, clima, el impacto del sol, el emplazamiento y orientación de un proyecto, va a impactar directamente en la baja de costos y consumos de los comitentes en su posterior vida cotidiana. Se puede diseñar de manera sustentable desde cero. Con una inversión del 1,5% del costo total en la elección de materiales y sistemas eficientes de la vivienda se genera 65% de ahorro de energía y un 63% de ahorro en agua, con una mejora por encima de la calidad de vida en amplias variables, cuidando así los recursos naturales.
Por otro lado, en relación a normativas, impuestos, cargas y costos que los usuarios deben asumir por materiales, productos o sistemas poco eficientes; la recuperación de esa inversión inicial es rápida y consecuentemente rentable, al elegirse materiales sustentables.
Arq. Guillermo Durán, director del estudio de arquitectura HABITAR SUSTENTABLE
MITO 2: “Hay sistemas constructivos que son sustentables y otros que no”
FALSO: los procesos y materiales constructivos pueden ser ampliamente diversos, y tener orígenes diferentes, sin limitarse exclusivamente a materiales naturales. Se puede combinar la construcción tradicional con materiales eficientes, y también utilizar sistemas constructivos como el steel framing, la construcción con adobe restituyendo técnicas centenarias, u otras formas sostenibles, combinadas con insumos y compuestos que requieren procesos más industrializados. La clave es poder realizar una elección adecuada y responsable para poder adaptar de manera más armoniosa las edificaciones al entorno que habitamos.
MITO 3: “la construcción sustentable es una moda, no tiene miras a largo plazo”
FALSO: construir de manera más amigable con el medioambiente no solo es una respuesta a una crisis climática general a nivel global sino es una forma consciente de gestionar y realizar edificaciones desde el plano proyectual y técnico, y establecer estándares de trabajo a largo plazo al momento de encarar una obra o remodelación. Cuanto antes se incirporen estos preceptos en la arquitectura e industria de la construcción más rápido se naturalizan las ventajas de la construcción sustentable, que tiene en la realidad soluciones concretas a los problemas contemporáneos de superpoblación y super explotación de recursos no renovables.
MITO 4: “Se necesitan poner muchos paneles solares para hacer una construcción sustentable”
FALSO: Existen diversas estrategias dentro de la industria que promueven el ahorro de consumos de energías no renovables. La arquitectura sustentable o regenerativa utiliza estrategias pasivas, como el diseño bioambiental, la elección de sistemas aislantes térmicos mas amigables como el medioambiente con el uso de lana de oveja, entre otros. En este mismo sentido la incorporación de paneles solares a un proyecto, para que la inversión sea efectiva realmente, debe ir acompañada de las herramientas antes mencionadas, en su conjunto, el uso de paneles solares, la correcta aislación, el diseño bioambiental, van a impactar positivamente en la obra y posterior vida de quienes vivan a diario la experiencia. Sin dudas el avance de la tecnología y de dichas herramientas puestas al servicio de la arquitectura moderna, permiten reconvertir de manera más eficiente todos los procesos propios de cada edificación. Son estrategias innovadoras durables que presentan una oportunidad de mejora significativa en lo que refiere a optimizar los costos a largo plazo,, con un mayor control de la eficiencia energética y una adecuada administración de los recursos gracias a estos avances e innovaciones cada vez más frecuentes y sostenibles.
MITO 5: “la construcción sustentable no es rentable y por eso no es elegida por los desarrolladores inmobiliarios”
FALSO: construir de manera más coherente con el mundo que habitamos nos permite eficientizar no solamente procesos sino también mejorar costos, consumos y sobre todo calidad de vida de quienes eligen esta forma de construir y vivir las edificaciones. Obtener espacios con mejor aislación termoacústica, hace que el ahorro de energía de fuentes no renovables sea más considerable, reduzca costos de consumo y mejore notablemente la climatización natural y esa conexión con el entorno esté en sintonía.
“Cada vez tenemos más clientes que se acercan con propuestas de desarrollos inmobiliarios a gran escala que requieren de una arquitectura sostenible, no solo por cuestión de costos, vida útil y mantenimiento de las edificaciones, sino también por los amenities que ofrecen a sus compradores. El público hoy en día busca edificios eficientes energéticamente, amigables con el medioambiente, ya que es un valor agregado y por tanto muchos buscan invertir allí. Hemos podido comprobar con nuestro trabajo que es posible lograr un balance perfecto entre diseño, confortabilidad con una arquitectura que puede alcanzar la armonía entre los seres humanos y la naturaleza que los rodea”, finaliza el Arq. Guillermo Durán.
Para más información puede visitar www.habitarsustentable.com.ar // @habitarsustentable
