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Según expertos, por el ajuste en la obra pública se desplomó el gasto en el mes de Abril
ARGENTINA.- El apuntalamiento del ajuste fiscal llegó de la mano del recorte del gasto. ¿La
fórmula? Menos subsidios y un fuerte aumento de tarifas -con menor incidencia que la esperada en el Gobierno- pero,
por sobre todo, por el atraso en la obra
pública.
De acuerdo con los números que
difundió ayer el Ministerio de Hacienda, el resultado primario (sin rentas
financieras) reflejó en abril un déficit de $ 12.757,9 millones, lo que
representó una mejora de $ 7172,2 millones respecto del resultado del mismo mes
del año pasado.
En tanto, si se tienen en cuenta
las rentas financieras (Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses y
utilidades del BCRA) y el pago de intereses de la deuda pública, el resultado
financiero de abril registró un déficit de $ 17.074,9 millones. Se trata de una
disminución interanual del rojo de 7028,5 millones de pesos. En cuanto a los
números acumulados para el primer cuatrimestre, el resultado primario sin
rentas financieras fue un déficit de $ 62.402,7 millones, una mejora de $ 1764,3
millones con relación al registrado en el primer cuatrimestre de 2015.
"El déficit se está
achicando a un ritmo más rápido que lo previsto pero no pensamos modificar la
meta", explicó Vladimir Werning, jefe de gabinete de la Secretaría de
Política Económica, en diálogo con periodistas acreditados en el Palacio de
Hacienda. "En estos primeros cuatro meses estamos dentro de los parámetros
que nos fijamos. Y eso también es importante porque la política fiscal va
ayudar a reducir la inflación", completó. Según indicó, la baja fue de
2,7% sólo si se hace el análisis a valores nominales, pero indicó que a precios
constantes la caída fue de 27,5 por ciento.
"Lo que sucedió en este
período es importante porque cuando proyectamos un déficit de 4,8% del PBI estamos
calculando implícitamente una mejora de 12% en términos reales", agregó el
economista.
"Estoy sorprendido por la
dinámica del gasto primario", explicó Maximiliano Castillo, economista de
la consultora ACM. En abril -contó el especialista en temas fiscales- el gasto
creció interanualmente al 13 por ciento. En el cuatrimestre avanzó al 24%,
mientras que los ingresos lo hicieron al 29 por ciento. El año pasado, con la
gestión de Cristina Kirchner, el Gobierno heredó un gasto creciendo al 35%. La
recaudación, recordó Castillo, avanzó a un ritmo promedio del 32 por ciento.
"La dinámica que venía del
anterior gobierno era insostenible porque el gasto crecía más que la
recaudación. Eso tenía que revertirse, aunque todavía el déficit es grande.
Pero este mes, en particular, bajó", agregó el economista de ACM, que
remarcó el fuerte recorte en gasto de capital por el atraso en el inicio de la
obra pública en esta gestión.
"El gasto de capital cayó
6,6 en abril", explicó Marina Dal Pogetto, directora del Estudio Bein
& Asociados. "Ocurrió porque llegó un gobierno que no tenía
instrumentados los mecanismos de la obra pública, pero es insostenible
políticamente mantener estos niveles", agregó la economista, que aclaró
que en términos reales habrá mucho menos ajuste del que se estima oficialmente.
Werning respaldó esos dichos. El
funcionario señaló que es muy probable que desde mayo, y a partir de la
normalización de la situación financiera, se vea "un aumento sostenido en
los gastos de capital".
En ese sentido, el jefe de
gabinete de la Secretaría de Política Económica agregó que, si bien el nivel de
gasto se redujo muy por encima de lo proyectado, no hay en estudio una revisión
de la pauta de déficit fiscal para el año: la ratificó en el 4,8 por ciento. En
ese sentido, los números del gasto fiscal parecen seguir aún el camino del
gradualismo.